Posicionamiento
El Estado de México se encuentra inmerso en un importante cambio demográfico. Para el periodo 2010 a 2020, la población de jóvenes, de entre 18 a 29 años de edad, se mantendrá relativamente estable. Sin embargo, durante el mismo periodo la población de adultos mayores se incrementará en casi 3 puntos porcentuales y la población de niños y adolescentes comenzará a decrecer de manera significativa al pasar del 35% al 28% de la población total. Frente a esta dinámica, la política educativa emprendida por el Gobierno del Estado de México tiene como fin contribuir a la formación de una ciudadanía capaz de enfrentar de manera crítica los retos políticos, sociales, culturales y económicos del mundo globalizado en el que se desarrolla.
De manera particular, la Educación Superior plantea importantes retos a nivel estatal, puesto que, actualmente, sólo dos de cada 10 mexiquenses en edad de estudiar este nivel educativo están inscritos. Aunado al reto anterior, se debe incrementar la eficiencia terminal, pues la deserción es de poco más del 25%. Ante tales desafíos, la FC contribuye ofertando educación de calidad en sus programas educativos de licenciatura y posgrado. Sin embargo, el nivel de exigencia disciplinar establecida en sus programas educativos ha impedido mejorar, de manera significativa, los índices de deserción sobre todo a nivel licenciatura. Asimismo, se vuelve importante involucrar a los egresados en la solución de problemáticas sociales a través de la vinculación temprana entre la Ciencia, las prácticas profesionales y el servicio social, con el sector público y privado.
Para la sociedad del conocimiento las fronteras en los ámbitos legales, económicos y comerciales no existen, ello ha permitido grandes flujos de intercambio de saberes. Como país no se han mantenido los niveles de desarrollo y no se ha podido definir con claridad el rumbo, lo que ha sumido a una parte importante de la población en la marginación, el empleo informal y el subempleo, el analfabetismo y la pobreza.
México es rico en tradiciones, cultura, biodiversidad y, lo es más, en potencial humano. El país debe encarar las mismas asimetrías que caracterizan al mundo actual, añadiendo a este reto el de superar rezagos históricos.
Como organismo socialmente responsable, la FC debe enfrentarse a una agenda de problemas tales como: la mejora y preservación de la salud humana, el abatimiento de la pobreza, la mejora y sustentabilidad de la alimentación, el adecuado manejo de los ecosistemas y del agua, el desarrollo de nuevas fuentes de energía, la preservación del patrimonio cultural e histórico, la gestión del conocimiento y, el desarrollo pleno, justo y equitativo de los individuos. Todos asuntos en los que la educación, la ciencia y la tecnología juegan un papel de trascendencia innegable.
Como nunca antes en la historia de la humanidad, las sociedades globalizadas del conocimiento han dispuesto de herramientas tecnológicas que permiten difundir el conocimiento, la ciencia y la cultura a velocidades impresionantes. La tecnología es el motor del desarrollo económico y social de las naciones, su difusión y aplicación ha tenido como consecuencia el incremento en los niveles de vida de los individuos, desde los económicos hasta los de confort. Sin embargo, también ha tenido efectos adversos tales como la dependencia a la tecnología y la ampliación de la brecha de desarrollo entre los países más avanzados y los menos favorecidos.
La FC no está aislada de los esfuerzos de internacionalización que realiza la UAEM; tiene colaboraciones con la Universidad del Norte de Texas (UNT), así como constante participación de investigadores con sus contrapartes en otras universidades del extranjero. Aunado a lo anterior, la movilidad estudiantil favorece oportunidades de desarrollo complementarias para los alumnos.